
Se trata de una ruta cómoda que discurre por caminos en buen estado. Destaca la subida al propio cerro Tejonera, dentro ya de los límites del parque nacional de Monfragüe, la magnífica dehesa de Navacalera o la posibilidad de avistar numerosas especies de aves, sobre todo grandes rapaces como el águila imperial y los imponentes buitres negros.